DICTAMEN ANTE LOS RIESGOS NATURALES Y CLIMÁTICOS EN LOS PIRINEOS

Parece probado por los hechos que la realidad o, más bien la actualidad, esa visión parcial que acaba por suplantarla, tiene un cierto trastorno bipolar. Esto que es una certeza en muchos ámbitos de la convivencia, patente desde el parlamento de la nación hasta el último de nuestros pueblos, en asuntos tan vitales como la gestión del agua o de la energía, es igualmente patente en Pirineo aragonés. 

Obras del telecabina Benasque-Cerler

Asistimos al espectáculo de un gobierno autónomo que ignora la sentencia del tribunal de lo contencioso administrativo de Huesca que anula el proyecto del telecabina de Benasque porque reconoce que la estación de salida y el aparcamiento se encuentran en zona inundable, además de dar la razón a los litigantes en cuento a que, cuando se dio el visto bueno a este proyecto, no existía un estudio geológico en varios soportes de la infraestructura y que no hay ningún estudio de viabilidad económica. 

En la misma línea los medios de comunicación no hacen más que reflejar las bondades del Plan Pirineos que, para unos es la solución a todos los males históricos y para otros la consolidación de un modelo de desarrollo que hace años ha demostrado su inutilidad. Los límites planetarios y el cambio climático en particular, parecen ser una realidad ignorada para los inquilinos del Pignatelli mientras la especulación urbanística y la irracionalidad en la gestión de los recursos naturales siguen siendo seña de identidad. 

En el otro extremo de la actualidad/realidad de la cordillera que une Aragón y Francia, el Observatorio Pirenaico del Cambio Climático (OPCC), junto a las 46 entidades socias del proyecto, ponen a disposición del territorio su conocimiento científico, su experiencia y sus recomendaciones, fruto de un trabajo sostenido de cooperación transfronteriza, con el objetivo de reforzar la resiliencia y la seguridad del macizo pirenaico frente a los efectos del cambio climático.

Se diría que hay dos sensibilidades alejadas en cuanto a la visión de un territorio y un paisaje de una extrema fragilidad cuya gestión no parece caminar en la dirección aconsejada desde el Observatorio Pirenaico del Cambio Climático.

Termina el "Dictamen ante los Riesgos Naturales y Climáticos en los Pirineos" diciendo que la emergencia climática no conoce fronteras. Sólo mediante una cooperación transfronteriza efectiva, una gobernanza local activa y una financiación estable podremos garantizar la seguridad, la sostenibilidad y la habitabilidad de las zonas de montaña. El proyecto LIFE SIP Pyrenees 4Clima invita a todas las instituciones, organizaciones y habitantes de los Pirineos a sumarse a esta respuesta colectiva: comprender más para temer menos, y actuar hoy para proteger el mañana.

Se trata de acelerar la respuesta y preparar a los Pirineos ante los escenarios de cambio climático más probables, considerando el creciente impacto humano en el territorio, ampliando y estrechando lazos de cooperación entre entidades y responsables de la administración, gestión territorial y sociedad civil, en el marco de las acciones previstas en el proyecto LIFE SIP Pyrenees4Clima de transferencia y replicación (WP10).

“No hace la codicia que suceda lo que queremos, ni el temor que no suceda lo que recelamos.”

Francisco de Quevedo